Fortaleza en el día de la angustia

Pr Lic. Guillermo Sebastián Olivera
Nahúm 1:7  Jehová es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían
INTRODUCCIÓN
Los asirios consideraban a Nínive como una fortaleza invulnerable. Además de sus poderosos muros, un sistema de canales, parapetos, fosos y guardias armados proveían una fuerte defensa. A pesar de la fortaleza de Nínive, el Señor es la verdadera fortaleza de aquellos que en él confían.
En éste versículo Nahúm entra en su tema especial, para lo cual los versículos anteriores han preparado el camino, es decir, para asegurar a su pueblo que en Jehová estaban a salvo bajo el inminente ataque de Senaquerib, y para anunciar la condena de Nínive, capital del enemigo asirio. El contraste de los vv. 7 y 8 realzan la fuerza de los mismos. Jehová Conoce a los suyos propios; y así los cuida y los guarda.
Con inundación impetuosa es decir, con irresistible poder, que como torrente lleva por delante toda barrera. Esta figura se aplica muchas veces a los irresistibles ejércitos invasores. También es imagen de calamidad en general. Hay, quizás, una alusión especial al modo en que Nínive fue capturada por el ejército de los medos babilonios, a saber, por una creciente del río que derribó veinte estadios del muro. Hará consumación de su lugar—“lugar de ella”; se personifica a Nínive, como una reina; su residencia, la ciudad misma. O bien, El destruirá tan completamente a Nínive, que su lugar no podrá ser hallado. Tinieblas las más severas calamidades.

DESARROLLO
Recuerda que "El diablo le puso a Jesús las mismas trampas que nos pone a nosotros para hacernos pecar, sólo que Jesús nunca pecó. Por eso, él puede entender que nos resulta difícil obedecer a Dios. Así que, cuando tengamos alguna necesidad, acerquémonos con confianza al trono de Dios. Él nos ayudará, porque es bueno y nos ama.
Si Dios aun no ha respondido a tu suplica El sigue siendo bueno, si tu oración no ha tenido contestación todavía El sigue siendo bueno; es más déjame decirte que la Bondad de Dios no se mide por las respuestas que El te pueda dar , por el trabajo en el que pueda ponerte , o por cualquier cosa que haga a tu favor , simplemente Dios es Bueno porque ese es un atributo de Él.
Es por ello que aunque no tengas lo que anhelas, que aunque en el presente estés viviendo cosas difíciles, que aunque la higuera no florezca ni en las vides haya fruto tenemos que reconocer que Dios es Bueno; que interesa si no te ha respondido, que importa si las cosas van cuesta abajo; déjame decirte que aunque las cosas no estén de lo mejor, Dios sigue siendo Bueno; mucha gente mide la bondad de Dios por lo que recibe de Él y no por lo que El es.
Dios en estos tiempos está buscando a personas que le reconozcamos no por lo que El puede hacer por nosotros y mucho menos por lo que puede darnos, sino más bien, por lo que El es. Por más que la angustia haya venido a tu vida por las cosas que en el presente estés viviendo Dios es tu fortaleza y conoce El que tu confías en El; hay que poseer una fe inquebrantable tal como la de nuestro Maestro que aunque el Padre le dejo morir en aquella Cruz nunca negó la bondad de Dios.

Conclusión

A veces Dios va a permitir que el agua nos llegue al cuello para probar si en realidad estamos confiando en El y reconocemos que El es Bueno a pesar de lo que nos permita atravesar.
Quizás en estos días la escases ha tocado a tu puerta, la falta de trabajo, la angustia, la depresión, el desanimo, el desaliento ha tocado a tu puerta y lo más difícil no es que ha tocado sino que le abriste y le permitiste entrar de modo que tienes dentro de ti un poco de huéspedes los cuales te han agarrado del cuello y te imposibilitan reconocer que Dios es Bueno; pero este es el momento en el cual reconozcas la bondad de Dios para contigo ya que si en el pasado te ha mostrado que es Bueno, en el presente también lo hará y no te dejara defraudado en un futuro ; por eso si quieres echar fuera aquello que hay dentro de ti y darle el lugar el espacio y el reconocimiento que Dios se merece.
Te invito para que oremos juntos en este momento: Padre Nuestro que estás en los cielos , en este momento me rindo a ti y gracias te doy porque tú eres mi fortaleza en el día de la angustia ; reconozco que tu eres Bueno, que tu eres suficiente, que tu eres poderoso, que tu cada mañana me visitas en mi lecho y que siempre tienes cuidado de mi, toma el lugar y el espacio que te corresponde dentro de mí y ahora le ordeno a todo aquello que hasta este día me estaba oprimiendo salir de mi por el poder de la Sangre de Jesucristo y el Nombre que es sobre todo Nombre, Amén.
Recuerda esto todos los días de tu vida, pues es necesario y urgente que lo hagamos:

Isaías 40:31  pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.